Palma da un paso histórico hacia la transformación de su frente marítimo. El alcalde, Jaime Martínez Llabrés, ha presentado este miércoles el concurso de anteproyectos arquitectónicos que convertirá el abandonado edificio de GESA y su entorno en un gran complejo cultural y de innovación, un proyecto llamado a redefinir la relación de la ciudad con el mar.
“Es un gran proyecto de ciudad, un proyecto transformador que va desde Avenidas hasta el Palacio de Congresos”, ha señalado el alcalde al presentar una iniciativa que marcará un antes y un después en la fisonomía urbana de Palma.
De símbolo del abandono a motor cultural
El edificio de GESA, cerrado y degradado durante 15 años, fue adquirido por el Ayuntamiento en marzo de 2025 tras un largo proceso judicial. Con esta operación se recuperó una pieza estratégica del litoral, clave para el futuro Palma Culture and Innovation Bay, el gran polo cultural y creativo que quiere impulsar el Consistorio.
Con la aprobación este miércoles de las bases del concurso, la ciudad entra ahora en la fase decisiva para su transformación real.
Un ámbito de 30.000 metros cuadrados frente al mar
La actuación abarcará un espacio de casi 30.000 metros cuadrados, en el que se combinarán:
- La rehabilitación integral del edificio de GESA
- La construcción de dos nuevos equipamientos públicos
- La creación de zonas verdes, espacios libres y aparcamientos subterráneos
Todo ello respetando el carácter patrimonial del edificio, manteniendo su volumetría, la emblemática fachada de muro cortina, la ubicación de accesos y escaleras, así como elementos originales interiores como pomos, lámparas y piezas del artista Luis Castaldo.
Una nueva conexión subterránea con el Paseo Marítimo
Uno de los elementos urbanísticos más ambiciosos será la prolongación subterránea de la calle Joan Alcover, que cruzará soterrada Joan Maragall hasta desembocar directamente en el Paseo Marítimo.
Esta solución permitirá:
- Conectar barrios y mar sin romper las zonas verdes
- Crear el acceso al parking subterráneo
- Mejorar de forma radical la movilidad peatonal en toda la zona
Un auténtico “campus” cultural, social e innovador
El futuro complejo se organizará en tres grandes ámbitos, con usos flexibles y complementarios. Entre los equipamientos más destacados figuran:
- Centro Cultural de Arte, Creación y Exposiciones, que ocupará obligatoriamente el edificio de GESA
- Biblioteca Central Municipal
- Ludoteca y mediateca
- Archivo Municipal
- Instituto Municipal de las Artes, con talleres para artistas
- Centro de Interpretación de la Energía, ligado a la historia industrial del lugar
- Auditorio con tecnología avanzada
- Espacios para incubadoras y aceleradoras de empresas
- Zonas de coworking para emprendedores
- Talleres de creación e investigación
- Residencias temporales para artistas
- Áreas de restauración en las plantas superiores
- Almacenes para reserva de obras de arte
Además, el complejo tendrá una zona expositiva exterior, integrada en los espacios abiertos, y contará con conexión peatonal con Es Baluard des Príncep y el Palacio de Congresos, uniendo todo el recorrido hasta el Parc de la Mar.
Palma mira a Europa
El proyecto está alineado con la candidatura de Palma a Capital Cultural Europea 2031, y busca posicionar la ciudad como referente cultural, medioambiental y de innovación del Mediterráneo.
“Recuperamos la fachada marítima, conectamos la ciudad con el mar y ponemos este espacio al servicio de la ciudadanía”, ha subrayado el alcalde.
Un concurso abierto, anónimo y con premios de 120.000 euros
El concurso de ideas será:
- Abierto
- Anónimo
- De fase única
El jurado estará integrado por representantes municipales, vecinales y expertos en arquitectura y urbanismo, garantizando un proceso transparente.
Se repartirán 120.000 euros en premios:
- Primer premio: 60.000 €
- Segundo premio: 30.000 €
- Tercer premio: 30.000 €
Además, el equipo ganador podrá redactar el proyecto definitivo de obra y actividades.
El plazo máximo de presentación es el 1 de abril de 2026.
La nueva puerta de entrada a Palma
Por su ubicación privilegiada, su apertura total al mar y su vocación cultural y tecnológica, este futuro complejo será la nueva puerta de entrada a Palma desde el litoral y la autopista de Llevant, convirtiéndose en uno de los grandes símbolos de la Palma del siglo XXI.
