Mallorca impulsa la construcción de una rotonda y un vial cívico para conectar Crestatx con sa Pobla

El presidente del Consell de Mallorca, Llorenç Galmés, ha presentado hoy un ambicioso proyecto de mejora de la seguridad y movilidad en el eje sa Pobla – Crestatx. La iniciativa incluye la construcción de una rotonda de acceso a la urbanización y un vial cívico que conectará el municipio con las urbanizaciones de Crestatx, s’Obac y Son Toni, atravesando la autopista y el torrente de Sant Miquel.

Con una inversión de 2,7 millones de euros, este proyecto transformará significativamente la movilidad en sa Pobla, aumentando la seguridad vial y fomentando el uso de medios de transporte sostenibles. Las obras, que tendrán una duración de diez meses, podrían comenzar antes del verano e incluirán medidas de integración paisajística y sostenibilidad.

Un proyecto esperado por los vecinos

Durante la presentación, Galmés estuvo acompañado por el alcalde de sa Pobla, Biel Ferragut, el consejero de Territorio, Movilidad e Infraestructuras, Fernando Rubio, y el director insular de Infraestructuras, Rafel Gelabert. El presidente del Consell de Mallorca destacó la importancia de esta obra: «Antes de este verano confiamos en poder iniciar unas obras esperadas y reivindicadas por los vecinos de sa Pobla y de las urbanizaciones de Crestatx, s’Obac y Son Toni. Conectamos estos núcleos con sa Pobla mediante movilidad sostenible, mejorando la seguridad en una zona donde desde los años 60 no se habían hecho actuaciones importantes».

Galmés también recordó que este proyecto forma parte del Plan de viales cívicos que impulsa el Consell de Mallorca, con más de 60 kilómetros de viales y una inversión de 45 millones de euros.

Detalles de las obras

La intersección en T de la carretera de Pollença será reemplazada por una rotonda, facilitando el tráfico hacia Crestatx, la ermita y las urbanizaciones cercanas. Además, se mejorará la seguridad de estudiantes y peatones que deben cruzar la carretera.

El proyecto contempla también la mejora del firme, la instalación de un nuevo sistema de drenaje y un alumbrado LED, cumpliendo con los criterios de sostenibilidad y normativa vigente.

Se construirá un vial cívico de 2,5 kilómetros para peatones y ciclistas, conectando sa Pobla con las urbanizaciones cercanas. Este incluirá pasarelas de madera sobre el torrente de Sant Miquel y muros de contención en zonas con desniveles. Para garantizar la integración paisajística, se utilizarán materiales ecológicos y especies autóctonas en el diseño del pavimento y la vegetación.

Compromiso con la sostenibilidad

La actuación pone especial énfasis en la sostenibilidad ambiental, reutilizando materiales existentes y aplicando criterios de eficiencia energética. Además, se instalarán barreras mixtas de acero y madera y una nueva señalización adaptada para mejorar la seguridad vial y prevenir accidentes.

Con esta iniciativa, el Consell de Mallorca reafirma su compromiso con la mejora de la movilidad y la seguridad en la isla, apostando por soluciones sostenibles y adaptadas a las necesidades de los ciudadanos.