La investigación de la Guardia Civil ha determinado que el hombre de 42 años fallecido el lunes tras ser arrollado por un tren en Marratxí (Mallorca) se lanzó de manera intencionada a las vías. Las pesquisas descartan por completo la intervención de terceras personas, por lo que todo apunta a que podría tratarse de un caso de suicidio.
Reconstrucción del trágico incidente
El suceso tuvo lugar sobre las 19:00 horas, cuando un tren de la línea Palma-Inca circulaba en sentido Inca, a la altura del polígono de Marratxí y cerca del tanatorio. La maquinista detuvo el convoy tras notar un fuerte impacto y, al descender de la cabina, se percató de que el tren había arrollado a una persona.
Inmediatamente, se activó un amplio dispositivo de emergencias. Sanitarios del Ib-Salut acudieron al lugar, pero solo pudieron certificar el fallecimiento de la víctima. También se desplazaron efectivos de la Policía Local de Marratxí, mientras que la Guardia Civil inició una investigación para esclarecer los hechos.
Los agentes reconstruyeron los momentos previos al accidente y concluyeron que el hombre se encontraba solo. Se barajaron dos hipótesis: una caída accidental a las vías o una acción voluntaria. Finalmente, la investigación ha reforzado la segunda opción, indicando que el hombre se arrojó intencionadamente a las vías.
Interrupción del servicio y levantamiento del cadáver
El fallecimiento fue comunicado al Juzgado de Guardia de Palma, y un médico forense examinó el cuerpo en el lugar del suceso antes de que el juez ordenara su levantamiento.
El tráfico ferroviario permaneció interrumpido durante varias horas hasta que concluyeron las investigaciones y el cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Palma. Pasadas las 21:16 horas, los Servicios Ferroviarios de Mallorca (SFM) informaron de la reanudación del servicio.
Este trágico suceso ha conmocionado a la comunidad y ha reabierto el debate sobre la seguridad en los pasos a nivel en la isla.
